Cómo Apple censuró a la revista Muy Interesante.
¿Cómo se práctica la censura en Internet? Ayer se conoció un caso con algunas novedades para la industria mediática. La revista Muy Interesante ha visto secuestrada su tirada digital durante los últimos diez días. Y hasta ayer no levantó la voz, ante las quejas de los usuarios que estaban suscritos a la publicación. Apple, el todopoderoso gigante tecnológico, metió en el congelador el número de febrero al considerar que una fotografía de un desnudo masculino vulneraba su política sobre contenidos para adultos, ya que el medio del grupo G+J está encuadrado en la categoría de mayores de 12 años... Y secuestró la publicación, dejando sin distribución a través del tablet más vendido a Muy Interesante.
Tiene todo el derecho: es su iPad, su sistema, su quiosco y tiene sus reglas. Para los defensores de los ecosistemas cerrados este es un buen ejemplo de lo que puede llegar a ocurrir cuiando se pierde el control de la distribución del producto. "No tenemos comentarios sobre el tema", señalaron sobre este asunto desde Apple a este diario. Para compañía estadounidense, es normal bloquear ese tipo de contenido de tipo erótico o sexual por la restrictiva legislación vigente en EEUU. Pero no en España, por eso el episodio ha sorprendido buena parte de la industria de los medios, que han puesto precisamente en la plataforma electrónica del iPad, por su distribución digital y capacidad de pago, buena parte de sus esperanzas de reconversión y salvación industrial.
Actualmente, según estimaciones del sector, el tablet de Apple ocupa una posición de dominio sin igual en este mercado. Por eso, con estos movimientos, cualquier periódico o revista, televisión o radio, expone su producto en un escaparate controlado por otra empresa que en cualquier momento puede decidir cerrarlo. ¿Censura? Sí, por supuesto. Salvando las distancias es la misma que se puede llegar prácticar con la denominada ley SindeWert y comiencen a ordenarse el cierre de webs. ¿Qué ocurriría si Apple decidiese bloquear la publicación de un diario español por una noticia de calado político o económico?
El lamentable episodio pone de manifiesto la cuestión de la plataforma como fin o como medio. Generar, por ejemplo, una legión de fans de un medio o compañía en Facebook o un aplicación de noticias específica para esta red social supone perder en la práctica el control final sobre la publicación. Se deja en manos de otra compañía tu comunidad o tu contenido. Incluso la fuerza comercial y el modelo de negocio. Internet, a través del ecosistema web, ha sido prácticamente libre desde su concepción y debe seguir siéndolo pese al auge de las aplicaciones. Seguro que los editores de Muy Interesante y de otros medios como Orbyt que se han lanzado a los brazos de Apple se repensarán la estrategia. La libertad de prensa está en juego.
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