El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en su primera visita
al hemiciclo desde que ocupa el cargo, ha reconocido que la reforma
laboral que aprobará el Consejo de Ministros este viernes no servirá
para nada, ya que en 2012 "las cifras de empleo van a empeorar". Todos
los grupos parlamentarios le han exigido flexibilidad y sentido común a
la hora de abordar la reducción del déficit público.
En
una declaración que ha despertado la perplejidad en medios sociales,
Rajoy ha desvelado que su paquete de medidas serça “amplio profundo y
equilibrado”, y nada más. En la línea de lo callado por su ministra de
Trabajo ayer, el presidente del Gobierno no ha sentido la necesidad de
explicar a los representantes dela soberanía popular las medidas que
piensa aprobar pasado mañana, y ha preferido darles la sorpresa el
viernes.
Eso sí, Rajoy se ha metido en un ‘jardín’ francamente curioso, ya que
ha reconocido que las cifras de empleo, a pesar de las medidas del
Gobierno, "por desgracia", no van a mejorar en el corto plazo, sino que
empeorarán en el año 2012. Sin embargo, pese a reconocer su inutilidad,
el presidente se ha mostrado absolutamente decidido a acometerlas.
Es más, Rajoy ha apuntado que de las altas cifras de paro en nuestro
país no se puede culpar a la regulación del mercado de trabajo y a la
legislación laboral. "Sería un profundo error", ha dicho, tras insistir
en que, a pesar de esto, se necesita una "profunda reforma" que
favorezca la creación de empleo. Aunque el presidente no ha explicado
como contribuirán a crear empleo –eso sí dentro de unos años- la
supresión de derechos laborales y normas legales que él mismo reconoce
que no están actuando como frenos a la contratación.
Así pues, con la lógica y la argumentación de vacaciones en el
discurso de Rajoy, el líder de la derecha ha insistido en aprobar un
paquete de medidas que, tiene que ser "útil" para la consecución de un
clima que favorezca la competitividad, la contratación y el empleo
estable.
Ya puestos, Rajoy, que por la vía de urgencia dinamitó cualquier
posibilidad de acuerdo entre los agentes sociales, ha asegurado ante los
diputados que él es partidario de que la ordenación legal en este
terreno cuente con el apoyo de las partes directamente implicadas
--sindicatos y empresarios--, aunque los agentes sociales no han
avanzado de "forma clara" en algunos aspectos que afectan a la reforma
como la intermediación, la contratación, la flexibilidad interna, la
formación o la estructura de la negociación colectiva.
Tras explayarse ampliamente sobre la herencia recibida, el presidente
ha asegurado que no pretende atenuar "en lo más mínimo" el peso de la
responsabilidad que le toca asumir. "En la política no existe la
herencia a beneficio de inventario. Sabíamos y sabemos lo que nos
espera. Sabíamos y sabemos que se nos juzgará por lo que consigamos y no
por lo que intentemos o por cómo hayamos encontrado las cosas", ha
indicado.
Al mismo tiempo, ha recordado los compromisos asumidos por España al
entrar en el euro, como el de garantizar las finanzas públicas con el
Pacto de Estabilidad y Crecimiento. "Este compromiso nos lo impusimos
nosotros mismos, la Unión Europea no nos obliga a nada", ha dicho, tras
considerar "evidente" que España está "muy lejos de cumplir".
Según Rajoy, el plan del Gobierno es recuperar el "tiempo perdido" y
realizar en el tiempo más breve posible las reformas estructurales que
permitan ganar flexibilidad y competitividad, mantener una senda
sostenible de las finanzas públicas y asegurar el crecimiento y la
creación de empleo.
Para Rajoy, lo primero es asegurar la sostenibilidad, lo segundo
garantizar la viabilidad y credibilidad del sistema financiero y lo
tercero actuar sobre la competitividad y la flexibilidad. "Estas
reformas son la mejor tarjeta de visita ante la Unión Europea", ha
indicado.
Tratado desequilibrado
El portavoz del Grupo Parlamentario Socialista en el Congreso de los
Diputados, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha contestado a Rajoy el pacto
fiscal firmado por los países miembros de la Unión Europea en el Consejo
celebrado el pasado 30 de enero se limita a un "ajuste fiscal" y que
incluye sólo "retórica, retórica, retórica", dejando a un lado el
crecimiento.
En su primera réplica al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, tras
su comparecencia en la Cámara baja para informar sobre dicho encuentro,
el líder de los socialistas ha opinado que este Tratado Internacional
sobre Estabilidad, Coordinación y Gobernanza de la UE es "insuficiente" y
"preocupante" porque "sólo habla de estabilidad". La preocupación por el crecimiento se refleja en un solo artículo,
prácticamente todo el resto se centra en el pacto fiscal, en el ajuste,
para entendernos; en el combate contra el déficit", ha reprochado.
Así, Rubalcaba ha insistido en que esto supone "un desequilibrio
notable" ya que, a su juicio, "el tratado tenía que haberse preocupado
por el crecimiento, por equilibrar las políticas de ajuste y las de
crecimiento, que es lo que todo el mundo pide".
Sin apoyo al crecimiento
A renglón seguido, ha reconocido que los líderes europeos
suscribieron posteriormente "una declaración para suplir esa parte del
tratado", si bien ha considerado que ese texto es sólo "retórica,
retórica, retórica... jerga comunitaria".
De hecho, "hay una mención a las pequeñas y medianas empresas y
una piadosa mención a que el proceso de recapitalización de los bancos
debe hacerse con cuidado para que no haya problemas de falta de
financiación", pero "no hay más" sobre estos temas.
Rubalcaba, como todo el resto de los portavoces parlamentarios que
han intervenido en el debate con la sola excepción del PP, ha demandado
de Rajoy flexibilidad y sentido común para abordar la corrección del
déficit público sin por ello estrangular la actividad económica del
país. Igualmente, le ha exigido que hable claro y explique exactamente
la participación de cada administración del Estado, central, autonómica y
local, en el montante de deuda pública.
En resumen, la oposición al completo ha criticado al Gobierno por
centrar todas sus políticas en la austeridad y dejar de lado el estímulo
de la economía, ya que sus portavoces consideran que la contención del
déficit no es suficiente para salir de la crisis y regresar a la senda
de crecimiento y creación de empleo.
De hecho, algunos de ellos también ha criticado al jefe del Ejecutivo
por no aprovechar la cumbre para pedir más tiempo para reducir el
déficit. En concreto, el portavoz de CiU, Josep Antoni Duran i Lleida,
ha recordado al Gobierno la importancia de llevar a cabo medidas
concretas para estimular el crecimiento porque la austeridad por sí
misma "no será suficiente" y no traerá crecimiento económico ni empleo.
Escrito por: MANUEL ARIAS
Fuente de la noticia. Diario Progresista
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